¡Hermano y compañero Pablo Ríos, hasta la victoria siempre!

Como Iglesia Pentecostal Dimensión de Fé en IADLA, como hermanxs en la fe y compañerxs de camino, abrazamos cálidamente a quienes hoy lloran junto a nosotrxs el fallecimiento de nuestro compañero y hermano Pablo Ríos.

Luchador comunista inclaudicable, profundamente militante del internacionalismo, Pablo nos deja un legado de compromiso y coherencia que seguirá ardiendo en el corazón de nuestras batallas cotidianas.

Recordaremos por siempre su abrazo y acompañamiento para con nuestra comunidad en los momentos más críticos, pero más aún su presencia, su palabra, su reflexión en nuestros debates, nuestros encuentros y jornadas en las que tanto aprendimos de él, junto a él.

Que el dolor que hoy nos acongoja se convierta de a poco en esperanza revolucionaria, en fe vuelta organización junto a lxs nuestrxs para seguir construyendo el rojo amanecer que tanto anhelamos para todas, todes y todos.

Como diría hace tantos años el compañero poeta guatemalteco Miguel Ángel Asturias cuando escribía su poema Credo a Bolívar, tenemos la certeza de que Pablo Ríos, compañero, hermano y camarada, como tantxs otrxs que nos antecedieron, «no mueren, cierran los ojos y se quedan velando».

¡Hasta la victoria de la vida y el amor, siempre!
¡Compañero y hermano Pablo Ríos, presente!
¡Venceremos!